Después de un baño o una duche, notas tu cuerpo limpio hace que también te sientas limpia por dentro.

La limpieza corporal es uno de los tratamientos de belleza más antiguos que existe, hubo un tiempo en que algunos países se extendieron la idea de que bañarse era peligroso para la salud, de modo que durante décadas el baño dejo de formar parte de los hábitos diarios. Ni siquiera se bañaban los monarcas, los aristócratas ni los ricos cortesanos. Por fortuna, tomar una ducha es un tratamiento cotidiano y prácticamente imprescindible.

Debes saber que hay distintos limpiadores corporales

Ciertos productos pueden quedar preciosos en la repisa del baño. Pero además deben proporcionar bienestar a tu piel y hacer que tenga buen aspecto. Averigua que producto es mejor para ti.

Jabón liquido

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Para el baño o dicha esta forma espuma al mezclarlo con agua y es fácil de extender sobre el cuerpo. Algunos jabones tienden a ser más densos que otros, y en ocasiones  contienen agentes hidratantes que proporcionan una agradable sensación. Para pieles normales es ideal este tipo de limpiador.

La gama es muy amplia, es fácil encontrar uno adecuado para cada gusto y tipo de piel.

Jabón en crema

El jabón en crema es muy hidratante, su densa formula se reparte suavemente sobre la piel al mezclarla con el agua. También puede verterse bajo el agua para tomar un baño hidratante de burbujas. Todas estas fórmulas suelen tener la misma textura suave y densa. Sin embargo algunas contienen ingredientes refrescantes o estimulantes, mientras que otras pueden incluir componentes relajantes.

Además, los jabones en crema suelen contener productos como el coco, aceite de almendras, aguacate o aceite de oliva lo que proporciona inmediatamente hidratación a tu piel.

La limpieza suave para pieles secas y sensibles resulta ideal.

¡Hidrata tu piel mientras la limpias!

Jabón de pastilla

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La pastilla de jabón es una opción más tradicional, puede ir desde las pastillas básicas de jabón hasta jabones transparentes especiales.

La mayoría de los jabones en pastillas son industriales que contienen soda cautica y grasas animales tales como el cebo.

Los jabones naturales a menudo son a base de hidratantes más naturales como la glicerina.

Este tipo de jabón es ideal para limpiar pieles normales y grasas. A su vez cuenta con una facilidad de acceso, cuenta con una amplia gama, fragancias y franjas de costos.

¿Cómo fabricar tu jabón en casa?

Preparar tu propio jabón te permite variar la formula y adaptarla a las necesidades de tu piel, también aseguras que los ingredientes sean naturales.

Prueba utilizando miel. La miel y la ceja de abejas de este jabón de perfume delicioso le confieren a la piel propiedades hidratantes, curativas y anti edad.

Puedes comprar una base para jabón de glicerina, o bien puedes usar una pastilla de jabón transparente derretida.

  • 110g de jabón a base de glicerina.
  • 1 cucharada de cera de abejas.
  • 3 cucharadas de miel.

Derrite la glicerina para jabón lentamente en un bol a baño María, añade la cera de abeja y remueve hasta que se haya derretido también, retira el bol del fuego e incorpora la miel sin dejar de remover. Vierte la mezcla en moldes pequeños.

Debes esperar aproximadamente 15 minutos para que se endurezca.

Un consejo de experto

Prepara una alternativa al jabón con harina de garbanzos y aceite de oliva, frota tu cuerpo con esa mezcla… Para limpiar, suavizar y exfoliar tu piel.

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Una buena ducha proporciona placer y bienestar inmediatamente, lo que beneficia a la salud emocional.

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