Tanto si este invierno nos está pareciendo más frío que algunos anteriores como si estás habituado a temperaturas muy bajas durante estos meses, lo cierto es que lo más común en muchos hogares es encender la calefacción para lograr el merecido confort en ese espacio. Sin embargo, también es cierto que durante estos meses el consumo se dispara; algunas veces incluso hay quienes sopesan renunciar a estos medios para calefactar la casa y optar por abrigarse o utilizar mantas, pero el ambiente sigue siendo frío y no es ni de lejos tan confortable como un ambiente a una temperatura más alta.
Eficiencia Energetica en el hogar
Igual que sucede con las instalaciones de aire acondicionado, debemos saber que existen maneras de reducir el consumo y mejorar la eficiencia energética del hogar incluso en los meses más fríos sin necesidad de renunciar a la confortabilidad de la calefacción. A continuación os daremos algunos consejos a seguir para lograrlo.
Aislamiento del hogar
Antes de centrarnos propiamente en las maneras de ahorrar con nuestros equipos de calefacción, es necesario contemplar una evidencia que puede provocar un gasto innecesario y que se puede solucionar de forma sencilla. Un inmueble debe estar aislado de forma óptima para que cualquier medio de refrigeración o de calefacción surta efecto; sino estaremos desperdiciando energía y dinero de forma inútil.
Hay que comprobar que no existan grietas por las cuales pueda colarse la temperatura del exterior; mejorar el acristalamiento de las ventanas resulta una idea excelente, así como cuidar todos los aspectos relativos a la carpintería de la casa. Un hogar bien aislado aprovechará mucho más la temperatura que programemos.
El sol, un aliado natural
Igual que durante los meses de verano bajamos las persianas para evitar que se cuele en la casa el calor sofocante del exterior, durante los meses de invierno también debemos aprovechar el clima y el sol para ayudar a que nuestro hogar resulte más eficiente. Durante la mañana y las horas de sol que siguen es importante abrir las ventanas y apartar las cortinas, dejando que la luz entre y ayude a calefactar nuestro hogar de forma natural. De esta manera, cuando encendamos la calefacción, la temperatura de base será más alta y habremos aprovechado horas de subida de temperatura natural.
Apostar por los mejores equipos
La tecnología y los equipos que elegimos para climatizar nuestro hogar tienen una importancia vital a la hora de controlar el consumo y la eficiencia que obtenemos. Por esa razón, si dispones de aparatos obsoletos como una caldera vieja es posible que su rendimiento esté provocando una subida del consumo y una inefectividad que repercute directamente en tu bolsillo. A la hora de invertir en un equipo elige aquellos que ofrezcan la mejor tecnología asociada a la eficiencia y a la efectividad; los últimos modelos hacen mucho hincapié en cuestiones como hacer el menor uso posible de energía.
Los radiadores y su mantenimiento
Para todas aquellas personas que en su hogar disponen de aparatos como radiadores para que proporcionen calor, deben saber que es importante realizar un mantenimiento para que estos sigan siendo eficaces y su rendimiento no suponga una merma en el propio ambiente y en la factura del mes. Hay que evitar cometer errores de uso, como por ejemplo secar ropa húmeda encima de ellos (su rendimiento baja en picado); otro de los consejos esenciales respecto a estos aparatos es que debemos realizar purgas, ya que si estos acumulan suciedad o tienen algún fallo de funcionamiento, no obtendremos el calor deseado y continuaremos incrementando el gasto. Purgarlos antes de empezar la temporada invernal resulta una excelente idea.
El combustible, una elección esencial
De la misma forma que no todos los equipos están diseñados para resultar más eficientes, el tipo de combustible que utilicemos para calefactar nuestro hogar también determinará en buena medida el gasto económico que tendremos que invertir para obtener un ambiente confortable. Sin duda, decantarse por instalar gas natural es una de las mejores opciones del mercado; sistemas como el carbón suponen un gasto mayor y no tan eficiente, y en cuestiones de coste la electricidad también se sitúa por encima del gas natural. Los beneficios de este combustible son muchos, y aunque de forma primordial nos ayudará a obtener energía de forma más eficiente también estaremos favoreciendo un menor impacto medioambiental.
Electrodomésticos con gas natural
Cada vez es más normal tener en cuenta el gasto energético a la hora de elegir el conjunto de electrodomésticos que formarán parte de un hogar. De la misma manera que debemos escoger con acierto equipos y aparatos de calefacción que supongan una buena relación coste-eficiencia, también deberemos tener esta misma actitud a la hora de elegir el resto de electrodomésticos. Cada vez hay más modelos que hacen uso del propio gas natural para funcionar, lo cual supone una gran ventaja energética en cuanto a su utilización, reduciendo en gran medida el consumo de electricidad en el hogar.