El divorcio es un proceso que suele volverse un tanto tedioso y en el que influyen muchos factores que tanto los involucrados, como el tribunal y los abogados deben tener en cuenta. Conocer los derechos propios es fundamental para poder exigir a tiempo lo que le corresponde a cada una de las partes.
Al comenzar un proceso de separación legal son muchos los aspectos que deben tenerse en cuenta. En ocasiones, el proceso puede ser largo y a veces pueden surgir algunas inquietudes, como qué tipo de derechos tiene uno de los cónyuges si no trabaja. Existe una serie de contemplaciones que vale la pena recordar y, en caso de no saberlas, te recomendamos que continúes leyendo.
¿Que derechos tengo en caso de divorcio si no trabajo?
Los derechos que deben estar garantizados al momento de llevar a cabo un proceso de separación legal son muy importantes y deben ser tenidos en cuenta. Pueden surgir varias dudas al respecto, por lo que comenzaremos esclareciendo que, en primer lugar, según el Artículo 97 del Código Civil se le debe brindar una pensión compensatoria temporal o por tiempo indefinido a aquel cónyuge que sufra un desequilibrio económico tras el divorcio. La cantidad y su duración deben estar estipulados en la sentencia y será el juez quien lo decida, en el supuesto caso en que los cónyuges no logren llegar a un acuerdo.
¿Puedo recibir una pensión?
El tribunal tendrá muy en cuenta los motivos de desempleo y cada uno de los casos, ya que en determinadas situaciones uno de los cónyuges se encuentra desempleado voluntariamente, es decir, para obstaculizar a la otra parte. En otras circunstancias se debe a dificultades por discapacidad o factores semejantes, por lo que la decisión del juez puede llegar a cambiar.
Las circunstancias siempre son variables, por lo que los abogados defensores serán particularmente quienes tengan en cuenta las posibilidades de exigir esta pensión al momento de asesorar a cada una de las partes.
La pensión compensatoria (que no debe confundirse con la pensión alimentaria) rige en especial para aquellos matrimonios o uniones legales en relación de derecho común con hijos, tanto como en relación de derecho común durante al menos tres años y sin hijos.
Esta no se otorgaría si la parte que dice ser afectada por el divorcio en realidad pudiera vivir sin problemas una calidad de vida igual o semejante a la que vivía durante el matrimonio. El tribunal tendrá en cuenta una serie de criterios para asegurar que el cónyuge realmente necesite de la pensión compensatoria tras el divorcio.
Por otra parte, la pensión alimentaria apunta a que, cuando uno de los cónyuges vive con los hijos, se encuentra en su derecho de exigir una manutención por estos, especialmente si son menores de edad. Las dos partes son responsables por la crianza de los hijos, y esto cambiaría con otros procesos legales. Si una de las partes quisiera otorgar la responsabilidad parental a la otra parte, debería pedírselo a la corte y sería el tribunal quien decidiera definitivamente.
A su vez, la ley determina que los hijos pueden solicitar a la corte que se le otorgue la responsabilidad a alguna de las partes, sólo si cuentan con doce años o más. El padre elegido será responsable legalmente del niño hasta que este cumpla los veintiún años, o en otras palabras, la mayoría de edad. Los niños mayores de doce años siempre tienen derecho a hablar ante el tribunal con respecto a la separación.
¿Cómo sé de qué forma debo proceder?
Durante los procesos de divorcio es muy importante que ambas partes cuenten con representación legal, de modo que sus intereses sean defendidos y sea más fácil llegar a una instancia de negociación. Un profesional puede poner a disposición del cliente todas sus herramientas, le hará saber exactamente cuáles son sus derechos y de qué forma puede reclamar su cumplimiento. Un bufete que cumple con todo ello es el de Herranz Ramia, un bufete compuesto por abogados especializados, capaces de brindar asesoramiento en cualquiera de estos casos
Si llegasen a ponerse en juego otros reclamos, un abogado como los de Herranz Ramia puede identificar las circunstancias y si efectivamente hay lugar para tales exigencias, como es el caso de la pensión compensatoria. A veces deben llevarse a cabo acuerdos previos para poder acceder a ciertos intereses, por eso es que la representación legal es fundamental.
Si además hay hijos menores de edad involucrados en el panorama, un abogado hará de intermediario para reconocer los derechos de cada una de las partes y qué otros procesos se deben realizar, como la responsabilidad parental o la pensión alimentaria.
