La belleza tiene un gran valor para muchas personas, pero también es algo profundamente subjetivo, lo que resulta bello a día de hoy, probablemente resultaba de mal gusto o antiestético hace cincuenta años, y las diferencias aumentan cuanto más se retrocede en el tiempo.
Esto tiene su parte positiva, pues el sector de la estética vive en un continuo autodescubrimiento y reinvención, pero también puede llegar a tener terribles consecuencias.
El reto de Kylie Jenner es un buen ejemplo de una moda con efectos realmente negativos sobre la salud de sus practicantes, pero por desgracia, aquel reto que consistía en crear succión en los labios con un vaso para hincharlos y que produjo numerosos casos de necrosis, e incluso gangrena, no era ni de lejos la moda más peligrosa que estaba por llegar.
La aparición de los ‘’labios del diablo’’ ha estado rodeada de controversia desde su aparición inicial, con mucha gente no llegando a creerse que las imágenes fuesen reales.
Y es que cuesta creer que esta forma y textura puedan suceder en unos labios reales, pues las imágenes muestran labios con un antinatural patrón ondulado o con numerosos ángulos en la zona del borde labial, los cuales se ganaron el nombre de ‘’labios de pulpo’’ junto con el de ‘’labios del diablo’’.
A continuación se profundizará en esta controversia, sobre cómo exactamente se lleva a cabo este procedimiento, así como con los numerosos peligros que supone para la salud y la estética de una persona que se arriesgue a llevarlo a cabo.
Cómo se hacen los ‘’labios del diablo’’
Para entender cómo se logra este efecto en los labios, lo primero es tener un conocimiento básico sobre el funcionamiento del ácido hialurónico, que es lo que se inyecta para provocarlo.
El ácido hialurónico es una sustancia relacionada con la hidratación y regeneración de las células, sobre todo en zonas como los tejidos conectivos, la epidermis y los tejidos articulares.
Debido a su capacidad para atraer y retener agua, al inyectarla en la capa profunda de la piel, la dermis, es capaz de darle protuberancia y consistencia a la zona en la que se inyecta. Además, la piel reabsorbe la mayoría del ácido hialurónico inyectado pasado un tiempo.
Para lograr el efecto de los labios de pulpo, la inyección se hace en los bordes del labio, formando cúmulos para que la piel del mismo forme un patrón ondulado. Sin embargo, los profesionales del sector estético que se muestran en contra de esta práctica avisan de que la inyección inadecuada del ácido hialurónico puede suponer un daño para los vasos sanguíneos de la zona.
Si los vasos sanguíneos quedan muy dañados se pueden llegar a formar coágulos, los cuales pueden provocar una necrosis de la zona afectada, y con ésta, daños irreversibles y que pueden requerir de cirugía urgente.
En resumen, este procedimiento supone un acto irresponsable por parte de aquellos profesionales que lo lleven a cabo, debido a sus peligros y a la irreversibilidad de éstos, igualmente para aquellas personas que lo hagan por su propia cuenta, lógicamente.
Otros procedimientos más seguros con efectos parecidos
Pese a que los ‘’labios del diablo’’ muestran un caso de mal uso de la cosmetología, la realidad es que ésta puede ser una gran ayuda en la vida de aquellas personas con problemas de autoestima, siempre y cuando se lleve a cabo a través de las manos de un profesional cualificado y bien formado.
Procedimientos como la eliminación de arañas vasculares, el relleno labial o la blefaroplastia, están bien estudiados y llevan siendo practicados durante años con seguridad.
La blefaroplastia consiste en una eliminación de la grasa de la zona de los párpados, lo cual ayuda notablemente a mejorar el aspecto de la cara en conjunto, y a rejuvenecer a aquellas personas que se someten al tratamiento.
Estos procedimientos son completamente seguros y beneficiosos para las personas, al contrario que los ‘’labios del diablo’’, que pueden perjudicar a la salud de forma severa.